Desde el inicio de nuestras reivindicaciones pedimos condiciones dignas y no incrementos salariales ni otro tipo de retribución. De hecho no somos el único colectivo que así lo hace. Todas las que luchamos por la sanidad pública coincidimos en muchas de nuestras reclamaciones, que no tienen relación con el incremento de los salarios.
Si nos retrotraemos años atrás a la anterior crisis económica: los recortes en sanidad, junto a otros factores, hicieron que aumentara la carga de trabajo. Aumentó debido a que las contrataciones así como nuestros derechos se vieron reducidos. Lo sufrimos en nuestras carnes el personal fijo, el personal eventual y ante todo los pacientes con la inaceptable bajada de calidad de nuestros cuidados. La existencia de una sobrecarga asistencial no es compatible con una buena calidad de la misma.
Nos consideramos personas comprometidas con la sociedad y entendemos que esa reclamación por lo tanto, sería injusta y más en un momento como este en el que se avecina una nueva crisis económica.
Seguimos solicitando lo más importante ahora y siempre, seguridad en nuestro trabajo para lo que necesitamos: equipos, material, formación y contratación estable. Necesidades que seguimos teniendo.
No dudamos que la medida de “gratificación para el personal sanitario“ esté pensada con una buena intención pero no es lo que urge.
Por otro lado, no nos podemos olvidar de nuestras compañeras consideradas personal no sanitario (celadoras, PSXs, TES, etc), imprescindibles en esta primera línea y a las que esta medida podría dejar fuera.
Por último también entendemos que el personal que cuida a nuestros mayores (residencias, ayuda a domicilio, etc) como también el personal que sigue trabajando para garantizar el abastecimiento de primera necesidad (supermercados, transporte, farmacias, etc) son junto a nosotras esa primera línea, por lo que pedimos que las medidas que se soliciten sean para garantizar ahora y siempre la seguridad de todas nosotras y de nuestras familias.
“Imagen del Banc d’Imatges Infermeres. Autoría: Ariadna Creus y Àngel García”