En el día de ayer en rueda de prensa, Alberto Nuñez Feijóo anunció la puesta en marcha de un “contrato de estabilización” que acogerá “sobre 100 enfermeros”, y que busca “garantizar su estabilidad laboral” y “reducir el número de contratos excesivos”. Desde Santiago, este contrato de continuidad es anunciado por la Xunta como un oasis en medio del desierto cuándo en la realidad es un simple espejismo.
Si nos ponemos en situación, este mismo tipo de contrato fue ofertado previamente a los médicos de familia y pediatría sin obtener aceptación. A pesar de eso desde diversos medios de comunicación se vendió como un éxito, cuando la mayoría optaron por rechazarlo tras conocer sus condiciones. Unas condiciones que generan una falsa sensación de estabilidad.
La Administración lleva mucho tiempo recurriendo a formas alegales para cubrir ausencias del personal hizo: no se cobren muchas de las incapacidades temporales de los trabajadores fijos, se refuerzan los personales de las plantas con contratos de acúmulos de tareas también usados para cubrir “huecos” estructurales, impidiendo y alargando su conversión a vacante.
Creemos firmemente que todas estas alegalidades se verán incrementadas con la puesta en marcha de este contrato eventual de continuidad y por lo tanto dará pie a que desde el Servicio Gallego de Salud se siga permitiendo una “contratación fraudulenta” como aseguró que existia pero “no siempre” la directora de RRHH el martes en la Comisión Parlamentaria.
Por lo tanto consideramos esta propuesta de contrato de continuidad, como un parche que alargará todavía más la precariedad en la enfermería y creemos que no es compatible reclamar estabilidad y aceptar por nuestra parte un contrato que te perpetua en la precariedad. ES por eso que no entendemos otro camino que no sea:
- Generar todas aquellas plazas que se perdieron durante la crisis y no se cubrieron debido a la Tasa de Reposición.
- Aumentar el número de enfermeras contratadas. Por cada mil gallegos hay 5,37 enfermeras. La tercera peor tasa de toda España, a la cola de la península y de Europa.
- Conocer los datos reales de la situación de los profesionales para que una situación como la actual no vuelvan a ocurrir. Transparencia 100%.
En resumen, de nuevo nos vuelven a ofrecer migajas pero la enfermería ya está cansada de esperas. Ahora es tiempo de apostar por ella sin titubeos. El tiempo de estar callados ya finalizó.